El fiasco del INSS hace más rico al ex presidente de Caja EspañaEl historial de un 'pelotazo'
* El casero Llamas tiene inquilinos por medio millón al año sin límite temporal
* Adquirió el edificio de Telefónica como una ganga y se libró de su protecciónA.F.R. | León
Actualizado lunes 14/11/2011 10:51 horas
El constructor y ex presidente de Caja España, Santos Llamas, es el único y gran beneficiado por el dispendio de los polémicos alquileres del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) tras la precipitada demolición de su sede de la avenida de la Facultad en espera de levantar un nuevo edificio que no verá la luz, de momento.Llamas es el titular de la empresa 'Gestión Inmobiliaria Álvarez Llamas', propietaria desde 2003 del edificio racionalista de la avenida Padre Isla número 16 donde el INSS trasladó en octubre de 2008 a sus 250 trabajadores a cambio de un suculento arrendamiento de 570.000 euros al año (IVA incluido).
En teoría, esta mudanza era provisional hasta la edificación de las nuevas oficinas de la Seguridad Social, un proyecto de 46 millones de euros, a los que hay que sumar los 3 millones que costó el derribo del anterior edificio, pero la crisis ha dejado el proyecto en vía muerta, por lo que el alquiler de Padre Isla, por el que ya se han desembolsado de las arcas públicas más de 1,5 millones, seguirá vigente.
El pasado mes de octubre se acordó una prórroga del contrato de arrendamiento hasta el 30 de septiembre de 2012 a revisar anualmente.
La génesis del 'pelotazoEste 'pelotazo' de uno de los padres de Agelco, que hasta ahora había conseguido pasar desapercibido, comenzó a gestarse mucho antes. A finales de los años 90 la compañía Telefónica comienza a poner a la venta en toda España muchos de los inmuebles que tiene en propiedad a través de un portal inmobiliario.
Uno de los edificios que aparecen en la lista es precisamente la sede central de la marca de telecomunicaciones en la ciudad de León, en Padre Isla. Un edificio catalogado que contaba con un nivel de protección 2 (La Catedral es 1) al estar considerado la muestra de arquitectura racionalista más representativa de la ciudad.
Fue diseñado por 1931 por Ignacio de Cárdenas, entonces arquitecto de Telefónica, aunque a finales de los años 40 sufrió una modificación a cargo de José María de Vega Samper y Paulino G. Gayo para adaptar el espacio a las necesidades de la empresa. El Docomomo lo recoge.
Con el paso de los años, el inmueble, ya protegido, pasó a engrosar la lista de los bienes en venta de Telefónica, pero el nivel protección impedía cualquier modificación tanto de su estructura interior como de sus fachadas, lo que sumado a su importante precio, restó interés a posibles compradores.
Ante esta realidad, Telefónica se vio obligada a ir rebajando su precio para darle salida.
Finalmente, ya en el año 2003, en el albor del ladrillo, 'Gestión Inmobiliaria Álvarez Llamas' adquiere el inmueble por un precio más que asequible, alrededor de 2 millones de euros.
Exactamente a 1,9 millones se eleva la cifra de la hipoteca que la empresa de Llamas logró de Caja Salamanca y Soria (que más tarde sería Caja Duero), según consta en el Registro de la Propiedad nº1 de León. La fecha en que se rubricó esta operación fue el 26 del junio de 2003 ante el notario José Villaescusa Sanz. Apenas una semana después de la llegada a la Alcaldía del socialista Francisco Fernández.
Llamas y Fernández mantienen una conocida y estrecha amistad que presuntamente habría posibilitado dos importantes hitos en este relato. En primer lugar, que el Ayuntamiento rebajara el nivel de protección del inmueble ya en manos de Llamas. Esto permitía al empresario modificar a su antojo la morfología del edificio, salvo sus fachadas, o, en otras palabras, liberarse de la traba proteccionista que había devaluado su precio de salida.
En segundo lugar, lejos de ocultar la inusual liberación patrimonial, el Consistorio leonés 'apadrina' un concurso de ideas para la remodelación del mismo y su conversión en sede de la incipiente Fundación Carriegos, también en manos de Llamas, y de las oficinas de su negocio de construcción.
Una rueda de prensa en la sexta planta del Ayuntamiento en abril de 2004, en la que participaron el entonces alcalde Fernández, el entonces concejal de Urbanismo, Francisco Gutiérrez, y el propio Llamas, oficializa la operación cimentada en la 'sensibilidad del Grupo Carriegos' para la recuperación para la ciudad de un edificio histórico caído en desuso.
Carriegos aportará un premio de 16.000 euros, lo que suscita la participación de arquitectos de toda España.
Ese mismo 2004 comienza a gestarse una operación paralela. Llamas también compra la vieja casa adyacente, en el número 18-20 de Padre Isla. Esta operación es posible gracias a una ampliación de la hipoteca del inmueble de Telefónica por otros 2,9 millones de euros formalizada, como la anterior, con Caja Duero, y que supone un reconocimiento implícito, según las fuentes consultadas, de que el valor real de la antigua sede de Telefónica era muy superior al precio de su venta, ya que le permite incrementar la hipoteca muy por encima de su coste inicial hasta rozar los 5 millones.
En definitiva, ser titular de un edificio 'liberado' le posibilita a mayores financiar una obra residencial nueva en la finca anexa. Llamas ingenia entonces un proyecto para unificar ambos edificios colindantes. La práctica totalidad se destina a viviendas, salvo tres plantas del edificio de Telefónica que quedan para oficinas y que se corresponden con la parte que el INSS tiene alquilado en la actualidad.
El Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) nº148 del 2 de agosto de 2005 recoge la aprobación inicial del estudio en detalle de la nueva obra de Padre Isla 18-20, firmada, por delegación del alcalde por el edil Rafael Pérez Cubero. 'Tiene por objeto(…) acomodar la volumetría del inmueble a las condiciones particulares de edificación establecidas por el Convenio Urbanístico suscrito para el edificio colindante por el Sur, igualando con ello alturas y medianeras, en una solución, por otra parte, de cierta complejidad volumétrica, como lo es también la solución aprobada para éste último edificio', advierte el propio anuncio del Bocyl.
Adiós al concurso de ideas
El 29 de abril de 2008 la nueva obra queda registrada formalmente sin rastro del concurso de ideas, lanzado únicamente para aportar soluciones al inmueble racionalista. Carriegos comienza a vender los pisos y traslada a las oficinas su nueva sede. Seis meses después estas oficinas son alquiladas al INSS.
Este arrendamiento tampoco se libra de la polémica. La precipitación en la actuación de la Seguridad Social a la hora de demoler su sede de la avenida de la Facultad, sin la garantía de poder construir un nuevo edificio, obliga a una mudanza que termina siendo millonaria para las arcas públicas.
El 28 de marzo de 2008, la Tesorería General de la Seguridad Social publica el 'pliego de condiciones técnicas relativo al arrendamiento mediante concurso público de un local en León para la ubicación provisional de la sede de la Dirección Provincial del INSS'.
Un extraño concurso en el que se exige un local de 2.500 metros cuadrados de superficie útil de los que 'la superficie mínima exigible en planta a nivel de calle será de 500 metros cuadrados', además, debe ubicarse en una avenida 'de primer orden' dentro del casco urbano.
El local ofertado por Llamas era el único en aquel momento que cumplía con las curiosas peticiones del INSS, algo que quedó demostrado al no presentarse ninguna otra oferta al concurso. El precio máximo que fijaban los pliegos eran 600.000 euros.
Pero quizá lo más sorprendente sea que las tres plantas que ocupa actualmente el INSS (la baja, la primera y la segunda) tan sólo suman 1.438 metros cuadrados: 532 la baja, 501 la primera, y 405 la segunda, según consta en el Registro de la Propiedad. La única manera de alcanzar los 2.500 requeridos pasa por sumar a lo anterior la superficie de las dos plantas sótano, destinadas, igualmente según el Registro, a garaje, con un trastero y un aseo en cada una. La suma total asciende entonces a 2.510 metros cuadrados y ya cumple con las condiciones.
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/11/14/leon/1321264299.html