Los administradores de TransicionEstructural no se responsabilizan de las opiniones vertidas por los usuarios del foro. Cada usuario asume la responsabilidad de los comentarios publicados.
0 Usuarios y 1 Visitante están viendo este tema.
Permítanme la cita de un intelectual de primera:Citar“Los partidos nacen y se constituyen en organización para dirigir la situación en momentoshistórica- mente vitales para su clase; pero no siempre saben adaptarse a las nuevas tareas ya las nuevas épocas, no siempre saben desarrollarse según se van desarrollando lasrelaciones totales de fuerza (y por lo tanto la posición relativa de sus clases) en el paísdeterminado o en el campo internacional... La burocracia es la fuerza consuetudinaria yconservadora más peligrosa; si ésta acaba por constituir un grupo solidario, que se apoya en símismo y se siente independiente de la masa, el partido acaba por volverse anacrónico, y en losmomentos de crisis aguda queda vacío de su contenido social y queda como apoyado en elaire”. Antonio Gramsci
“Los partidos nacen y se constituyen en organización para dirigir la situación en momentoshistórica- mente vitales para su clase; pero no siempre saben adaptarse a las nuevas tareas ya las nuevas épocas, no siempre saben desarrollarse según se van desarrollando lasrelaciones totales de fuerza (y por lo tanto la posición relativa de sus clases) en el paísdeterminado o en el campo internacional... La burocracia es la fuerza consuetudinaria yconservadora más peligrosa; si ésta acaba por constituir un grupo solidario, que se apoya en símismo y se siente independiente de la masa, el partido acaba por volverse anacrónico, y en losmomentos de crisis aguda queda vacío de su contenido social y queda como apoyado en elaire”. Antonio Gramsci
Los partidos son el problemaDecididamente, los partidos políticos son artefactos propios de otra época, de tiempos en los que la información y la instrucción eran mínimas, y las síntesis ideológicas, uniformadoras, radicales y excluyentes, propias de las organizaciones de masas, tenían sentido. Hoy, en la era de las tecnologías de la información y la comunicación —y de Internet—, lo común es que un ciudadano medianamente informado no coincida con el programa político de ningún partido —programa que, dicho sea de paso, no se cumple casi nunca—, aunque pueda estar de acuerdo con propuestas de varios de ellos. Prolongada su existencia más allá de la utilidad primigenia, que era la de representar diferentes modelos de estado y de formas de vida social —Partido Nacional-Socialista alemán, Partido Republicano norteamericano, Partido Comunista soviético, etc—, ya en pleno siglo XXI, los partidos políticos, y más los que tienen acceso al poder alternante, exhiben ideologías miméticas. Tras perder la mayor parte de su razón de ser tras el fin de la II Guerra Mundial, y el resto tras la caída de la URSS, les ha quedado a los partidos llamados "democráticos" la utilidad residual de seguir manipulando mentalmente a la ciudadanía con sus esquemáticos mensajes; la de embobarla para que los que detentan el verdadero poder puedan expoliarla sin obstáculos, hasta llevarla a la más absoluta ruina material, moral e intelectual. Como resultado, los partidos han acabado por constituir un fraude —ni siquiera son internamente democráticos—, y en lugar de ser vehículos hacia la libertad política, son los verdugos que la cercenan. Por eso, la alternancia PP/PSOE en el Gobierno de España nada significa, pues nada cambia: sale un grupo de poder y entra otro que toma el relevo de las restricciones de derechos y libertades y del expolio a las arcas del Estado. “Sin alegrarnos por ello, reconozcamos que cualquier desgracia que les suceda a los españoles —confiados romeros de la Virgen de la Urna— durante la nueva legislatura que se inicia, les estará bien empleada”. Los mismos ciudadanos que ponderan detenidamente cualquier compra, cuestionando la relación entre calidad y precio, delegan resignadamente las más importantes decisiones, que pueden costarles miles de veces más, en un partido cualquiera. ¿A qué viene tal conformismo? ¿A qué, tal desinterés por la política, que tan decisivamente afecta a sus economías familiares, a sus libertades y a su futuro ?Como no hay mal que por bien no venga, la situacion económica española es tan grave, que muy pronto los ciudadanos, tras tocar fondo, verán evidente que no pueden recurrir a otros para que les resuelvan sus problemas, entenderán que deben solventarlos por sí mismos. Comprenderán que los políticos de partido no existen para resolver los conflictos de quienes eligen la lista que los incorpora, sino para obedecer órdenes de los verdaderos dueños del mundo —que nunca son elegidos, sino que nos vienen impuestos—, mientran toman, a través de los mecanismos de la corrupción endémica, la parte que sus amos les conceden como migajas del gran banquete. Aunque se presenten como libertadores, todos los partidos pretenden “ser eficientes cómitres, a cargo del tambor y del flagelo, en la extracción de potencia de los remeros amarrados a las bancadas, a cambio del estipendio prometido por los armadores de la nave”. Las “ideologías de partido” son, por lo tanto, fraudulentos panfletos de fácil asimilación que sirven para manipular mentes y voluntades: izquierdas, derechas, estado del bienestar, cambio climático, déficit, energías alternativas, deuda, mercados... todo son fuegos de artificio. La democracia no existe ni ha existido nunca. Ni la inorgánica de partidos ni la orgánica corporativista. Ni en España ni en ningún otro lugar del mundo (*). Así de claro. No es que nuestra democracia sea deficiente y, por tanto, perfectible. Es que no comparece ni puede comparecer jamás en el actual orden de cosas. Dura veritas, sed veritas. Y bien pensado, ¿acaso la ciudadanía de los países occidentales —fieles prosélitos de la democracia aparente, bajo la férula de los lobbies que los financian a fondo perdido— merecen otra cosa que un fraude? ¿Realmente son los ciudadanos tan ciegos que desconocen la verdad, o es que participan del engaño, por conveniencia? La ciudadanía actúa con una mezcla de maldad, estupidez e inocencia que la conduce inexorablemente a la servidumbre voluntaria. La gente despierta, consciente de la realidad, debemos tomar la iniciativa. Resolver nuestros problemas prescindiendo de los partidos, que no existen más que para sojuzgarnos. Adoptar el camino de la verdadera representación política, sin duda necesaria, que pasa por la elección de personas concretas, de honradez probada, para ejecutar órdenes concretas decididas asambleariamente o para tomar decisiones políticas de acuerdo con un programa definido, pactado entre representante y representados. Así, no sólo nos ahorraríamos la carísima farándula partidaria, y tanto tiempo perdido en discusiones sin fundamento y en romerías a las urnas, sino que sentaríamos las bases para la definitiva desaparición de los partidos políticos, esas pesadas losas que sellan los túmulos donde yacen sepultados nuestros derechos y nuestras libertades.ÁCRATAS(*) La democracia estadounidense, que los bienintencionados luchadores democráticos citan como paradigma a seguir, no es lamentablemente posible: los dos partidos en alternancia de poder en EEUU no son democráticos, sino cárteles cooptados por los lobbies. Las decisiones del Congreso de los EEUU no son libres, sino trasuntos de acciones de poder real del Nuevo Orden Mundial. Si se estudian las contribuciones a las campañas electorales americanas, puede comprobarse que los lobbies financian por igual a ambos partidos, Demócrata y Republicano, con lo cual poco les importa cuál resulte ganador.
A Nora y asimilados. No solo nosotros vendemos todo lo que hay. La Iglesia alemana también. Ya sé que esto no es un portal inmobiliario pero pongo el link por si queréis comprar una Iglesia o algo así.Veo la sede de TE en una antigua Iglesia luterana de Vorpommern (Pomerania, magníficos caballos). Por cuatro duros.Saturno nos haría los programas IT, Taliván y Marx ideología, (comisarios políticos indispensables), capellán Manu, a la ventanilla Nora, etc etc. Lo que no se me ocurre es qué vender. Qué servicio ofrecer. Yo me ofrezco para vender humo, por ejemplo. http://www.kirchengrundstuecke.de/
Cita de: Manu Oquendo en Marzo 29, 2013, 11:47:25 amCita de: tomasjos en Marzo 28, 2013, 16:48:19 pmCita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 am ....... El único argumento real a favor del Euro es que como no limpiemos la casta política nos hunden con o sin euro y con el euro están un poco más controlados.En Resumen: Salir del Euro es una Transición Estructural y positiva, seguir dentro no lo es. ....... 2013: Piluca Bertolín es nuestra soberana .......
Cita de: tomasjos en Marzo 28, 2013, 16:48:19 pmCita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 am ....... El único argumento real a favor del Euro es que como no limpiemos la casta política nos hunden con o sin euro y con el euro están un poco más controlados.En Resumen: Salir del Euro es una Transición Estructural y positiva, seguir dentro no lo es.
Cita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 am
TitiPor "anarcocapitalista" hay que entender Ron Paul. Por estatista cargarse el Estado de las Autonosuyas.
Cita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 amPregunta para Tomasjos.¿Puedes explicar en qué "hundiría a los europeos la ruptura del Euro" ? A mi no se ocurre nada. Al contrario. SaludosPara empezar el flujo de capitales salvaje fuera de Europa para protegerse, en segundo lugar las deudas, que serían impagables, la pérdida salvaje de poder adquisitivo, la devaluación de los ahorros, la bancarrota total y absoluta, imposibilidad de pagar siquiera la menguante sanidad, educación , paro, etc... que tenemos, ... La única ventaja, poder realizar devaluaciones competitivas. Pero con una casta neoliberal y teniendo a los anarcocaps conspirando para devolver esto al feudalismo a la somalí imagínese lo que iba a pasar....
Pregunta para Tomasjos.¿Puedes explicar en qué "hundiría a los europeos la ruptura del Euro" ? A mi no se ocurre nada. Al contrario. Saludos
Cita de: tomasjos en Marzo 28, 2013, 16:48:19 pmCita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 amPregunta para Tomasjos.¿Puedes explicar en qué "hundiría a los europeos la ruptura del Euro" ? A mi no se ocurre nada. Al contrario. SaludosPara empezar el flujo de capitales salvaje fuera de Europa para protegerse, en segundo lugar las deudas, que serían impagables, la pérdida salvaje de poder adquisitivo, la devaluación de los ahorros, la bancarrota total y absoluta, imposibilidad de pagar siquiera la menguante sanidad, educación , paro, etc... que tenemos, ... La única ventaja, poder realizar devaluaciones competitivas. Pero con una casta neoliberal y teniendo a los anarcocaps conspirando para devolver esto al feudalismo a la somalí imagínese lo que iba a pasar....No pensaba responder por la falta de tiempo. Por el hastio que me produce el dejavu de volver a desmentir ciertas cosas y a explicar otras que invalidan ciertas tesis. Por no verme obligado a adoptar un rol repetitivo, encasillando mi nick.n Peero estimado Tomasjos, si me viene con esas, me veo obligado a repetirme m'as que el ajo.
Cita de: Barcenitas en Marzo 29, 2013, 12:07:48 pmCita de: Manu Oquendo en Marzo 29, 2013, 11:47:25 amCita de: tomasjos en Marzo 28, 2013, 16:48:19 pmCita de: Manu Oquendo en Marzo 28, 2013, 11:04:08 am ....... El único argumento real a favor del Euro es que como no limpiemos la casta política nos hunden con o sin euro y con el euro están un poco más controlados.En Resumen: Salir del Euro es una Transición Estructural y positiva, seguir dentro no lo es. ....... 2013: Piluca Bertolín es nuestra soberana ....... no hay transicion, hay laminacion; y en el mundo que viene, si eres pequeño, eres colonia/estado fallidohttp://www.burbuja.info/inmobiliaria/burbuja-inmobiliaria/408467-a-europa-y-especialmente-espana-este-nuevo-panorama-mundial.htmly hay que laminar a los que no se estan dejando, hay que exportarlos (si quieren seguir consumiendo, que lo hagan en/de otro sitio);marear con iglesias, constituciones o cambios normativos, solo alarga el proceso y oculta lo basicoFort Apache - ¿Un rey frente a la guillotina de la historia? La decadencia de Juan Carlos I