[Vivan el Rey, España, Europa y Oriente.— Donde quiera que vayas del mundo, no se entiende lo de
Álava, Guipúzcoa, Vizcaya y Navarra: que la administracioncita local-provincial sea el
sujeto activo en las relaciones jurídico-tributarias de los impuestos sobre:
• la
renta —personas físicas, comunidades de bienes y sociedades— y
• las
ventas empresariales;
y que no lo sea la administración central, soberana financiera en las materias:
• monetaria y
• aduanera y consumos específicos (circulación controlada, etc.).
Además, en el caso Español, estas dos materias soberanas —moneda y aduanas— se han puesto en común para arriba en una nueva administración pública creada 'ex profeso',
la UE, por lo que, en las desdichadas cuatro provincias de referencia, el Estado español ha quedado reducido a prácticamente nada. ¿Pero son unas provincias aestatales? ¡No!, evidentemente. Sin el Estado español no serían nada. Por ejemplo, no tendrían un ordenamiento jurídico de calidad. ¿Entonces qué hacen para tener leyes y reglamentos? Copian al Estado. Para que no digan, mten alguna morcilla —que cada vez rechina más por la penuria del funcionariado provincial, que no puede permitirse ni un miserable zulo, nunca mejor dicho—, editan un cuadernillo bilingüe y santas pascuas. Acto seguido, unas 'casuelas' y un zorcico.
En el pecado va la penitencia.
El diseño del sector público es un problema técnico, no político. Es estúpido entregarle competencias de los niveles superiores del sector público administrativo a
funcionarios 'de proximidad', porque se convierten en unos dictadorcillos de la señorita Pepis, personajes entrañables y no tan entrañables de 'Bienvenido Míster Marshall' (Berlanga, 1953).
Además, los cinco niveles de administración pública (local y provincial, regional, estatal, supraestatal y mundial) son todos próximos a ti. ¿Acaso el euro no lo es o las importaciones de China o la circulación de la gasolina?
La retórica que se emplea para justificar la
inflamación de las administracioncitas provinciales es
sonrojante: complejo de superioridad, perfil ortognático, boina, odio de patio de luces, etcétera, y síndrome de Estocolmo. Durante la intifada catalanista se escuchó en televisión a un charnego diciendo: «
Yo soy de Villar del Río, pero llevo viviendo aquí muchos años y tengo que reconocer que los catalanes lo hacen todo mejor».
En la época de los fenicios, se supo que la paz y amistad de los pueblos es la base del comercio y, con él, del desarrollo humano (v. Tartessos, que sucumbió por presión de los pueblos del norte de la península, no del Mediterráneo, como sabemos hoy —Cancho Ruano, El Turuñuelo—).
En el s. XIX, la eclosión industrial del capitalismo y el romanticismo, en provincias, muchas cabezas se llenaron de pájaros, especialmente las que tenían minas de carbón nitrogenado óptimo para los convertidores Bessemer del enemigo anglo. La provincia de 'sir' (ja, ja, ja) Ramón de la Sota, una de ellas.
En la anterior transición estructural, la del Desarrollismo al Popularcapitalismo —que coincidió con la muerte de Franco—, para la nueva Constitución, los provincianos vascongados ya no tenían carbones. Tenían cabrones. Y el miedo mueve la historia.
'
Stalin' —concepto soviético, no el personaje manco— es importante, no solo porque ganó a hostias la II Guerra Mundial, sino porque mostró cómo, a los 'gudaris' étnicos, se les somete a la plataforma común. '
Putin' —concepto de evolución soviética—, es el siguiente paso de 'Stalin', solo que, ahora, la guerra mundial es difusa y las civiles, culturales. Hay que reconocer que, desde la Revolución-1917, el sistema económico de Rusia siempre ha sido de capital planificado y orden civil, incluso durante la época del cártel de oligarcas y 'vori v zakone'. Casi lo mismo podemos decir de China y el concepto 'Xi Jinpin'.
En Occidente y Europa, hasta ahora, no ha habido plan para nada. Por supuesto, para la derrota tampoco lo ha habido hasta que
el Pinchazo 2006-2010 puso las pilas al Capital. Estamos acostumbrados a que las contradicciones civiles se acallen a golpe de sobrevaloraciones insostenibles que siempre acaban disolviendo la acumulación capitalista.
Occidente y Europa es el nuevo ejército de 'Pancho Villa' —concepto, no personaje—, con todos capitalistitas, 'generalos', generalas y generales, con las napias bajo el embozo, regodeándose en sus propias ventosidades. Pero las cosas están cambiando.
Las cuatro provincias vascongadas españolas dan la máxima nota desafinada en este panorama general, más de Occidente que de Europa. Junto a ellas, el separatismo catalanista, especialmente después del Memorándum de Entendimiento España-UE, de 2012, donde se programó acabar con el sistema de 'caixas', bancos de depósitos penetrados por las administracioncitas públicas locales y regionales, ultraespecializadas en el ladrillo. «Mi pisito un capital, mi terruñito una nación, mis ideítas una religión».
Pero se diría que, al final del modelo pop-cap, cuando más falta hacía, las izquierdas han conseguido embridar a la derecha neutralizando su energía disolvente de la Nación española, porque, no lo olvidemos, el provincianismo mal llevado es cosa de la derecha.
Fijaos en el caso de la delfín Ayuso. Su poder se fundamenta en la manipulación de las cuitas del propietariado, pero ella ha sido enervada políticamente por su propia vivienda, rebosante de mierda, incluso en sentido estricto.
Por eso decimos que, para resolver los problemas que nos impiden diseñar libremente nuestro sector público administrativo estatal e infraestatal, lo mejor es hacer
que todas las provincias, las 50, sean 'forales', eso sí, sometidas a la plataforma común paneuropea. Esto se conseguirá en la primera fase del modelo de
capitalismo planificado que Occidente y Europa inaugurará tras el
Desamparo-2025.]
[Se ruega colaboración para nuevas estrofas primera y última en...
https://www.youtube.com/watch?v=aMY-GZYAyIU... mejores que estos ripios que propongo:
In the year 2025
Zager, Evans & TE
In the year 2025
Your money's a hit
Your bricks, a shit
It's an ice dive
In the year 2525
If man is still alive
If woman can survive
They may find
In the year 3535
Ain't gonna need to tell the truth, tell no lies
Everything you think, do, and say
Is in the pill you took today
In the year 4545
Ain't gonna need your teeth; won't need your eyes
You won't find a thing to chew
Nobody's gonna look at you
In the year 5555
Your arms are hanging limp at your sides
Your legs got nothing to do
Some machine's doing that for you
In the year 6565
Ain't gonna need no husband; won't need no wife
You'll pick your son, pick your daughter, too
From the bottom of a long glass tube
In the year 7510
If God's a-comin', he oughta make it by then
Maybe he'll look around Himself and say
Guess it's time for the Judgment day
In the year 8510
God is gonna shake His mighty head
He'll either say, "I'm pleased where man has been"
Or tear it down and start again
In the year 9595
I'm kinda wonderin' if man is gonna be alive
He's taken everything this old Earth can give
And he ain't put back nothin'
Now it's been ten thousand years
Man has cried a billion tears
For what he never knew
Now, man's reign is through
But through eternal night
The twinkling of starlight
So very far away
Maybe, it's only yesterday
In the year 2525
If man is still alive
If woman can survive
They may thrive
In the year 2025
Your money's a hit
Your bricks, a shit
It's a new life]
[A lo largo de 2025, si se merece, habrá milagros celestiales —o, si no, se divisará a lo lejos una humilde figura montada en un asno—; y la llegada del mesías y, con él, la redención,
en el cuarto trimestre. No tenemos nada que hacer, salvo permanecer atentos.]
[Cuando hacemos comentarios entre corchetes ponemos el punto final antes del corchete de cierre porque, en realidad, no es un punto final. Es un punto y seguido 'sui generis'. Siempre los corchetes, junto con los paréntesis y las rayas, son para significar que no estamos en el discurso principal. Son delimitadores de segundo discurso. Nosotros los usamos como delimitadores también de nuestro segundo discurrir, que es permanente, aparte del principal, el estrictamente 'ppcc', que es una síntesis de lo que escribimos todos. Espero que se entienda. También tenemos nuestras razones para poner punto y raya en los títulos en mayúsculas. Lo explicaremos en otra ocasión. Animo a que todos pongan títulos en sus comentarios. Ayuda mucho. Y negritas, también.]