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Que opináis del artículo de Cárpatos en Idealistanews?http://www.idealista.com/news/archivo/2012/03/07/0413167-asi-he-puesto-el-precio-a-mi-casa-en-venta-por-jose-luis-carpatosParece que:
Que opináis del artículo de Cárpatos en Idealistanews?
ya es inferior al que en realidad costaría comprarse un terreno, urbanizar y edificar una casa
EL ABRAZO DEL KOALA, Marc GarrigasaitPor qué la vivienda ha caído un 40% en EEUU, a pesar de recuperación económicaLa bajada de los precios inmobiliarios en los Estados Unidos ya dura 5 años, con un porcentaje de caídas cercano al 40% desde sus precios máximos alcanzados en el año 2006. En cambio, la economía USA después del desplome de 2008 y primer semestre de 2009, se empezó a recuperar hasta hoy.........................En seis estados norteamericanos con un total de 85 millones de habitantes, entre el 40-50% de todas sus viviendas tienen un valor de mercado inferior a su deuda hipotecaria actual. Aquí podéis encontrar el cuadro de todos los datos por estados.......................Parece claro también que, excepto Michigan, por su crisis del sector automovilístico, el resto de estados en peor situación de deudas hipotecarias y por tanto del mercado de vivienda son los estados que han recibido mayor inmigración hispana, mejicana, centroamericana y cubana. Por tanto, no es difícil imaginar que han aumentado enormemente las desigualdades económicas y las peores situaciones se concentran en la población hispana.........................El total de deuda hipotecaria viva en Estados Unidos a septiembre 2011 “underwater” era de nada menos $2,8 trillones (anglosajones), aumentando desde los $2,7 trillones del trimestre anterior. Supone nada menos que el 27,8% de todas las viviendas de Estados Unidos con hipoteca, es decir 1 de cada 3.La crisis inmobiliaria norteamericana podría entrar en las fase final del largo ciclo bajista, disminuyendo la virulencia actual por los últimos embargos de los reajustes de las hipotecas subprime ARM que en verano 2012 prácticamente vencerán. Una vez el mercado pueda absorber estas nuevas viviendas embargadas, podrá poco a poco recuperarse. Lo normal es que en 2013 o 2014 puedan darse las primeras subidas de precios.En España en cambio, está solo al inicio de un largo ciclo bajista inmobiliario, ya que partía de una situación relativa mucho peor que en estados Unidos, con familias con menos ingresos, mayor endeudamiento inmobiliario y precios de los pisos mayores que los norteamericanos.
[Rajoy admite que es necesario revisar el Estado autonómicohttp://www.elmundo.es/elmundo/2012/03/07/espana/1331106057.html
El Gobierno comienza a sugerir cada vez con más claridad que la salida de la crisis tiene que pasar también por otra distribución de las competencias entre las Administraciones del Estado. El presidente, Mariano Rajoy, lo ha venido a apuntar esta mañana en la sesión de control en el Congreso, y su ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo ha reconocido poco después, también en la Cámara baja. "No saldremos de la crisis si no reordenamos competencias", ha asegurado.Una redistribución que no implicaría un cambio en el modelo territorial, como pide UPyD, y del que Montoro ha hecho una férrea defensa. "Una España descentralizada no es equivalente al despilfarro", ha afirmado.
Unnim para BBVA: http://www.transicionestructural.net/transicion-estructural/la-segunda-oleada-de-fusiones-en-la-banca-espanola-es-inminente/msg19795/#msg19795Y unas perlas de Hódar como interludio cómico:"Esperábamos que se mantuviese la tendencia alcista para llegar a Fallas con el Ibex a caballo de los 9.000 puntos. Pero…, va a ser que no.""Podríamos entrar a analizar lo que está pasando. Ya lo hace gente muy preparada. Pero a nada conduce."Esperpéntico lo de este 'hanalista'http://www.expansion.com/blogs/hodar/2012/03/07/la-bolsa-no-esta-hundida-pero-si-tocada.html
Montoro habla ahora de redistribución de funciones entre las Administraciones.CitarEl Gobierno comienza a sugerir cada vez con más claridad que la salida de la crisis tiene que pasar también por otra distribución de las competencias entre las Administraciones del Estado. El presidente, Mariano Rajoy, lo ha venido a apuntar esta mañana en la sesión de control en el Congreso, y su ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo ha reconocido poco después, también en la Cámara baja. "No saldremos de la crisis si no reordenamos competencias", ha asegurado.Una redistribución que no implicaría un cambio en el modelo territorial, como pide UPyD, y del que Montoro ha hecho una férrea defensa. "Una España descentralizada no es equivalente al despilfarro", ha afirmado.
Si el eufemismo reordenar es el mismo para las cajitas que para las administraciones autónomas, ya sabéis lo que toca, disminución de entes y despidos masivos. Es lo que tiene el NHD.Parece que nos acercamos a las puertas de Tannhäuser Zeit zu sterben.
elena salgado endesaángel acebes bankiajosep piqué grupo ferrocarril, vueling, applus…josé maría michavila jp morganpedro solbes enel, barclaysjosé maría aznar endesa, murdoch, Barrick Gold (la minera aurifera)felipe gonzalez gas naturaleduardo zaplana telefónicarodrigo rato lazard, santander y bankiaisabel tocino banco santanderjosu jon imaz petronoralfredo timmermans telefónicaluis de guindos lehman brothersadolfo suarez telefónicaleopoldo calvo sotelo moto vespa, banco central hispano americano, ferrovial, dragados...miguel boyer banco exterior, fcc, clh...josé antonio ardanza euskaltelnarcis serra caixa catalunya, gas natural...miguel angel moratinos qataradolfo suarez yllana bufete ramón hermosilla & gutiérrez de la rozajuan costa ernst & youngmanuel pimentel baker & mckenziemanuel pizarro baker & mckenziejordi sevilla pricewaterhouse coopers (pwc)eduardo serra everisdavid taguas seopanjuan manuel eguiagaray eads
José Luis Malo de Molina*LA CRISIS Y LAS INSUFICIENCIAS DELA ARQUITECTURA INSTITUCIONALDE LA MONEDA ÚNICALa crisis de la deuda soberana en el área del euro ha supuesto el inicio de una fasecrítica en el proceso de integración europea, en la que se han ido desvelandofragilidades fundamentales en la arquitectura de la Unión Económica y Monetaria.Estas debilidades, que se examinan en este artículo, permitieron que muchos paísesmantuvieran políticas económicas inconsistentes con el nuevo marco de integraciónmonetaria y también han limitado la capacidad para gestionar una crisis de estagravedad e impedir que la metástasis se extendiera hasta poner en entredicho lacontinuidad de la UEM. Reflexionar acerca de la naturaleza de estas fragilidadesconstituye el punto de partida necesario para encontrar las vías de superación de lasmismas.Los autores del proyecto, léase sus inspiradoresteóricos o los responsables políticos que lo impulsaron,eran conscientes de que una articulación coherentey adecuada de la política monetaria única conlas otras ramas menos integradas de la política económicarequeriría avances futuros hacia una mayorcorresponsabilidad en los terrenos fiscales y de otraspolíticas que suponían un grado de integración políticamuy superior del que en aquel momento se podíaplantearA los efectos del contenido de este artículo interesa,sobre todo, centrar la atención en aquellos factores ycarencias institucionales que han conducido al desencadenamientode la crisis de deuda soberana en el áreadel euro y han contribuido a la gravedad que la mismaha alcanzadoDos de estos rasgos son particularmente importantes. Unoexterno y otro interno. Por lo que se refiere al contextoexterno es suficientemente conocido que la primera décadadel euro coincidió a grosso modo con el período deexceso de liquidez y de crédito y de infravaloración generalizadadel riesgo que habría de conducir a la grancrisis financiera internacional y la recesión del 2008-2009A nivel interno, este clima de excesos globalesafectaron al área del euro en el momento que en se cosechabanlos efectos euforizantes que la moneda comúnejerció sobre ámbitos muy extensos del área, por loque su impacto se vio acentuado, particularmente en algunasde las economías participantes. Un dato que revisteespecial trascendencia es que todo esto ocurriócuando en el interior del área se registraba una situaciónde asimetría que respondía a un patrón inusual einesperado, porque mientras las economías centralesse enfrentaban a importantes dificultades de fondo paracrecer, las economías de la periferia experimentaban unsorprendente dinamismo. Alemania se encontraba todavíaen un período de digestión de los cambios estructuralesque había supuesto la reunificación y queocasionaba el predominio de una situación de atonía delgasto y de ajuste competitivo de costes y precios. Encambio, los países de la periferia se veían impulsadospor los enormes efectos expansivos de una reducciónpermanente de los costes de financiación, acentuadapor la exuberancia financiera global, y una generosaafluencia de fondos cuya movilidad se había amplificadocomo consecuencia de la desaparición del riesgo de devaluacióncambiaria y las facilidades que la moneda únicasuministraba a los movimientos transfronterizos decapitales. Esta inesperada asimetría propició la gestaciónde divergencias y desequilibrios encubiertos poruna convergencia real que avanzaba más rápido de loanticipado, pero en la que resultaba muy difícil desentrañarel componente sostenible de la misma.Algunos de los países que habían llegado a cumplir formalmentelos criterios de estabilidad macroeconómica por primeravez en su historia reciente no dieron la importancia necesariaa la tarea de continuar adaptando el funcionamientode sus economías para que ese logro fuera sostenibley pudieran desenvolverse con eficacia dentro delmarco exigente derivado de compartir una moneda fuertey estable con las economías más productivas del continenteeuropeo.Una de las fragilidades más patentes que emergieronfue la falta de funcionamiento del canal de ajusteque opera a través de la competitividad.Pero tampoco había instrumentos ni providencias suficientes en la gobernanzaeconómica del área de la moneda única quepermitieran identificar, y mucho menos prevenir y corregir,la aparición de estas divergencias, que en últimoextremo tendían a materializarse en términos deexceso de endeudamiento de algunos países.También resulta ilustrativa la resistencia de los Gobiernosa aumentar la capacidad fiscalizadora de Eurostatsobre la fiabilidad de las estadísticas nacionalesque terminó favoreciendo la falta de credibilidadde algunas de ellas.ConclusionesTranscurridos cuatro años desde que estallara la crisisfinanciera internacional, el área del euro se está enfrentandoa una acelerada pérdida de confianza de losinversores en la solidez del entramado institucional de lamoneda única. Este factor se ha convertido, además, enel principal foco de inestabilidad de la economía global.Por ello, la culminación de la reforma de la gobernanzaque se inició en 2010 adquiere una importancia vitalpara el proyecto europeo, y debería servir para relanzarel proceso evolutivo de creciente integración, que nosolo parece haberse estancado, sino retrocedido en losúltimos años.Como se argumenta en este artículo, una soluciónadecuada de las fragilidades de la arquitectura institucionalrequiere una cesión de soberanía y una integracióneconómica sustancialmente mayores de lo que losGobiernos nacionales estaban preparados a asumir. Porello, la reforma de la gobernanza se inició bajo la premisade que no supondría una modificación sustancial enla atribución de las responsabilidades en el diseño delas políticas económicas, lo que habría requerido cambiosfundamentales en el Tratado de la UE.Aun así se han conseguido avances importantes entodos aquellos ámbitos en los que, como se discute eneste artículo, el entramado institucional del euro hamostrado mayor fragilidad. En el ámbito fiscal, el desarrollode la crisis ha hecho necesaria la búsqueda defórmulas que hagan de Europa un espacio con mayorfederalismo fiscal. La reforma del Pacto supondrá unfortalecimiento de su carácter preventivo, así como laposibilidad de imponer sanciones a los países cuyas finanzaspúblicas se desvíen de los compromisos adquiridos.Y en la actualidad se discuten otras formulas alternativas(como la posibilidad de introducir un ministeriode Finanzas europeo y límites de gasto constitucionales)que sin duda limitarán la capacidad de los Gobiernospara desviarse de los requisitos de disciplina fiscal.También se ha diseñado un marco más eficaz de alertay vigilancia de los desequilibrios macroeconómicos ycompetitivos.Y más recientemente, se han dado pasos muy importanteshacia el diseño de un mecanismo permanente degestión de crisis, con la potencia suficiente para contrarrestarla capacidad desestabilizadora que pueden adquirirlos mercados financieros para los países pertenecientesa una unión monetaria. En este sentido, hay quetener en cuenta que tan solo hace un año que los paísesde la UEM tuvieron que enfrentarse al diseño del rescatede Grecia, que ante la falta de otros instrumentos tuvoque resolverse mediante préstamos bilaterales. Desdeentonces se ha creado el Fondo Europeo de EstabilidadFinanciera que estará vigente hasta 2013, cuando lesustituirá el Mecanismo Europeo de Estabilidad, recogidoen el Tratado de la UE. Y lo que es más importante, yaunque de una manera lenta, se le ha ido dotando deuna mayor capacidad operativa y de financiación paraque sea capaz de frenar los procesos especulativos quese habían desencadenado.Es evidente que todos estos cambios entrañan unamayor corresponsabilidad y coordinación en el diseño delas políticas fiscales y de reforma estructural, aunque elgrado de ambición con el que se han planteado puede noser suficiente para eliminar las fragilidades del proyectodel euro que han emergido durante la crisis. Sin duda alguna,varias de las reformas que se manejan en la actualidadpueden acabar representando un importante pasoadelante en el proceso gradual de aumento de la integraciónque esperaban los fundadores del proyecto de launión monetaria europea, tal y como se manifestó en elinforme Delors. Desgraciadamente, el catalizador de estamayor integración no ha sido las dinámicas virtuosasde convergencia, que podrían haberse desencadenadodentro de la unión monetaria si no se hubieran cometidotantos errores en el diseño de las políticas económicas, yse hubieran afrontado con mayor determinación las debilidadesde la arquitectura institucional que se han ido poniendode manifiesto a lo largo del proceso.En todo caso, en la esfera nacional resulta crucial quelos países tomen conciencia de la necesidad de implementarpolíticas fiscales más disciplinadas, de fortalecerlos marcos presupuestarios introduciendo límites legalesa las posibilidades de endeudamiento, y de removergradualmente las rigideces estructurales que han alimentadola magnitud y la persistencia de las divergenciasy desequilibrios en la unión monetaria.
La política económica necesaria.La importancia de las reformas económicasEn función de todo lo anterior resulta evidente que laeconomía española necesita actuaciones que abordenlos desequilibrios anteriores si queremos mantener sudinamismo y el diferencial de crecimiento con respectoa Europa que nos permita seguir cerrando nuestra brechade renta per cápita. Dichas actuaciones se agrupanen torno a dos ejes fundamentales. En primer lugar,la política presupuestaria tiene que jugar un papelimportante en la moderación de las tensiones inflacionistas.En una situación de fuerte crecimiento de la demandadoméstica y de tipos de interés reales negativosel mero mantenimiento del equilibrio de las finanzaspúblicas puede no ser suficiente. El intensoaumento de los ingresos tributarios impulsados por laconjunción de una demanda interna pujante y una inflaciónal alza no puede llevarnos a caer en el espejismode creer que disponemos de margen de maniobra en elgasto, y dejarnos llevar por la ilusión de que de cualquiermodo se va a obtener el equilibrio presupuestario.Por el contrario sería fundamental mantener en estascircunstancias un control estricto del gasto en todoslos niveles de las Administraciones Públicas, con aumentospor debajo de los del PIB nominal, lo que deberíaconducir a una senda de claro superávit fiscal. Nopodemos olvidar que en el seno de una Unión Monetariala política fiscal se convierte en el único instrumentode regulación de la demanda agregada a nivel nacional,y que además este es más poderoso que en la situaciónprevia de autonomía monetaria al no versecompensado por movimientos de tipos de interés ni detipo de cambio.Pero una política fiscal ambiciosa no sólo respondea las necesidades de la coyuntura actual. Resulta imprescindiblecontar con una situación holgada parahacer frente a la previsible caída de los fondos recibi-dos de la Unión a partir de 2007 si es que queremosmantener a partir de dicha fecha un nivel similar al actualde inversión pública, y a un horizonte no muchomás lejano, al cambio demográfico que se va a dar ennuestra pirámide de población, lo que sin duda exigirála adopción de medidas graduales, pero continuas, enlínea con lo acordado en el Pacto de Toledo. Por último,dentro del ámbito fiscal y para favorecer el ahorrofinanciero del sector privado resultaría adecuado continuaren la línea de las anteriores reformas tributariasque han ido reduciendo el peso de la fiscalidad de losproductos financieros en los que las familias españolascolocan mayoritariamente su ahorro, equilibrandolos incentivos actualmente existentes y que se encuentranmuy sesgados a favor de la inversión en vivienda.La segunda pata de la estrategia de política económicaviene determinada por el conjunto de medidasde reforma de mercados. Sin duda a fecha de hoy laeconomía española es mucho más flexible que haceuna década. No obstante, sigue mostrando en algunossectores situaciones de poder de mercado y en elmercado de trabajo comportamientos que obedecenmás a inercias de un pasado inflacionista y de economíacerrada. En este sentido, sería muy importantepara favorecer la competitividad aligerar las restriccionesque pesan sobre la distribución al por menor tantoen los horarios comerciales como sobre la apertura denuevos centros comerciales. Las limitaciones hoyexistentes merman las posibilidades de elección delos consumidores, dificultan la modernización del pequeñocomercio, y restringen la inversión privada y lageneración de empleo. Otra área prioritaria la determinael suelo y la normativa urbanística. Independientementede que la evolución del precio de la viviendaviene fundamentalmente influido por variables financieras,de evolución de población y empleo, las restriccioneshoy existentes en cuanto a la disponibilidadde suelo y la opacidad de los procedimientos urbanísticosy la incertidumbre que generan, dificultan el yade por sí complicado ajuste de la oferta a la demandaen la vivienda residencial. Por otro lado, la legislaciónvigente de arrendamientos urbanos limita la existenciade un parque de viviendas de alquiler amplio, quepudiera actuar como colchón amortiguador de la evoluciónde precios en el segmento de vivienda en propiedad,favoreciendo a su vez la escasa movilidadgeográfica de nuestra fuerza laboral. Por todo ello,cualquier reforma tendente a eliminar las restriccionesanteriores facilitaría la disponibilidad de un sector residencialcon una oferta mucho más profunda y variadaque la que disponemos hoy en día, y seguramentedebería venir acompañada de un nuevo sistema de financiaciónde los ayuntamientos que no incentivara lageneración de escasez de suelo urbanizable por partede éstos, como ocurre actualmente.Pero tal vez, la reforma de la que está más necesitadala economía española es la laboral y más concretamentela de la negociación colectiva. Un hecho ciertodel proceso de convergencia real en España es lanecesidad de que nuestros sueldos se ajusten a lamedia europea. Sin dicha aproximación resulta imposibledicha convergencia. Pero dicha aproximaciónexige para evitar problemas de competitividad que losincrementos salariales avancen en paralelo a los de laproductividad que es una variable que muestra en suevolución a lo largo y ancho de la economía un comportamientomuy dispar. Por ello, los sistemas de negociacióncolectiva excesivamente rígidos y que dificultanla autonomía empresarial pueden llevar a pérdidasde competitividad difícilmente asumibles en elcontexto actual. Por decirlo de otro modo, el problemano es la subida agregada de los salarios en Españaque tienen que ser por definición superior a la mediaeuropea sino la forma en la cual se configura dichasubida. No se trata de ir hacia un sistema de negociaciónabsolutamente descentralizado, que podría imponercostes innecesarios en las pequeñas y medianasempresas, sino más bien de establecer la posibilidadde modificar las condiciones del convenio deámbito superior si se cumplen determinadas circunstanciasen el ámbito empresarial.